lunes, 23 de febrero de 2015

No te aferres

Los días pasan después de mi regreso a Costa Rica y la rutina empieza a girar,  ya bien establecida,  hora a hora,  día a día.

El día inicia temprano y me siento como si estuviera en Mysore.  Levantarse tan temprano llena mi alma y de alguna forma me siento conectada a mi maestro,  a mis amigos allá.  Es una hora de silencio y automáticamente uno entra en un estado de introspección casi sin intentarlo.  Esta mañana abrí mi alfombra en la oscuridad del shala,  sólo iluminado por velas a esa hora.  Encender la luz es demasiado violento y parece sacrilegio.  Así que practiqué a una luz cálida que me permitía ver mis manos,  pero sobre todo sentirme más por dentro.   Todos dormían y fue fácil entrar.  Pero no fue fácil procesar lo que encontré en mi soledad.

A esta hora es difícil distraerme con gadgets,  comunicaciones y palabras.  Sólo el sonido de mi respiración.  Y las imágenes de caras del pasado empezaron a llegar, imágenes que quisiera olvidar.  Gente que ha dejado en mi vida un halo de confusión y dolor.  Gente que consideraba cercana y que en realidad eran sólo sonrisas de la boca para afuera.  Qué duro es reconocer que nos hemos equivocado. Qué difícil entender que tenemos su energía en nosotros sino no los hubiéramos atraído.  Qué gran oportunidad de verse uno mismo los puntos ciegos  a través de una relación.

El impulso inicial es cerrar compuertas y decirme que no tengo nada que ver con esa gente y que soy "distinta".  Eso quisiera pero ya sé que no es así.  Todos compartimos pedazos de ilusión,  de dudas y confusión.  Todos somos espejos unos de otros y encarnamos en grupos de almas,  en países,  en comunidades.   Nos reencontramos a veces a través de mucho dolor y desazón,  pero estamos hechos del mismo material y los encuentros tienen un sentido,  aunque nos tome muchos años realizarlo.

Mi ser más elevado comprende esto muy bien.  Pero mi personalidad no logra entender cómo puede haber gente tan desagradecida en este mundo.  Pienso en todas las veces que yo misma fui desagradecida....trato de recordar.  No recuerdo en esta vida pero estoy segura que hubo otras y todo regresa.  Así que me digo que estoy pagando karma y que todo queda anotado en los anales del Destino.  Si alguien fue mentiroso,  manipulador y utilitario conmigo,   a su vez le tocará recibir lo mismo en el futuro.

Estuve en un grupo muy interesante el fin de semana.  Hablamos de los órdenes del Amor.  Las familias son grupos donde el amor fluye o se bloquea.  El trabajo busca encontrar esos puntos de atascamiento para que dejemos de actuar patrones heredados inconscientemente.  El trabajo consiste en entrar en el fluir del Amor y ver adónde nos hemos cerrado.  Y caer en ese lugar no es nada bonito ni fácil.

Después de mi trabajo,  comenzaron a moverse muchas cosas en mi vida personal.  Encontrar la raíz del cacho necesariamente rebela miedos y condicionamientos escondidos.  Me dí cuenta que me he pasado la vida escogiendo hombres que remueven en mí todas las heridas infligidas por mi padre.  Hombres inaccesibles emocionalmente.  Verlo me dio un empujón muy fuerte para intentar no hacerlo de nuevo.  Siempre me he sentido atraída por un sinnúmero de características masculinas que sólo dolor me traen al final.

Nos aferramos a lo conocido,  aunque sea tan doloroso y repetitivo.  Los egos son bastante predecibles.  Buscamos a alguien que se sienta familiar.  Tiranos,  dictadores,  abusadores,  víctimas y saboteadores: todos hemos jugado los papeles una y mil veces y hemos convivido con el enemigo.  Círculos viciosos sin fin.  Está en nuestras manos buscar ayuda y encontrar una salida o perpetuar la tortura.

Descanso en mi cama después de un día activo.  He topado ángeles,  he topado demonios.  Un día más en este mundo del maya,  de lo falso y verdadero cohabitando.  Rescato un instante de Gracia pura mientras mi enano nadaba hoy en la tarde.  Con una manita sostenía una ranita de plástico que se convirtió en su amuleto.  Lo vi saltar al agua sin miedo,  cruzar la piscina con flotadores y patear con la fuerza tierna y todavía un poco torpe de sus tres añitos.

Pero su sonrisa me llenó el corazón de luz.  Igual que el silencio de esta madrugada.

Duermo con el viento y lista para lo que depare el día mañana, con la firme intención de no aferrarme a nada.

                                                 Soy el cielo...
                                               todo lo demás son sólo cambios en el clima.



1 comentario:

  1. A palabras necias.....oídos sordos. Por favor no se desgasten en contestarle a alguien que no merece la pena .La indiferencia es la clave. !!Namaste .

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